¿Qué es IaaS (infraestructura como servicio)?

Presentación sin título (40) copia

La infraestructura como servicio (IaaS) es un modelo de servicio en la nube que ofrece recursos de infraestructura bajo demanda, como computación, almacenamiento, redes y virtualización, a empresas y particulares a través de la nube.

Se trata de un modelo muy atractivo en comparación con la manera tradicional de adquirir recursos de computación con los que ejecutar aplicaciones o almacenar datos, ya que esta requiere una mayor inversión de tiempo y dinero. Las organizaciones deben comprar equipos a través de procesos de aprovisionamiento que pueden llevar meses. También deben invertir en instalaciones físicas (normalmente, salas especializadas con sistemas energéticos y de refrigeración). Además, las empresas necesitan profesionales de TI para gestionarlos y mantenerlos después de desplegar los sistemas.  

Escalar los recursos cuando se producen picos de demanda o el negocio crece es complicado con este modelo. Te arriesgas a que se agote la capacidad, o que se sature y pagues por una infraestructura que no usas nunca.

 

1. ¿Cómo funciona IaaS?

La infraestructura como servicio (IaaS) consiste en alquilar servicios de infraestructura en la nube como servicios individuales de un proveedor de servicios en la nube, incluidos servidores, máquinas virtuales, recursos de redes y almacenamiento. La infraestructura como servicio (IaaS) ayuda a eliminar gran parte de la complejidad y los costes asociados a la construcción y al mantenimiento de la infraestructura física en un centro de datos on‐premise.  

El CSP se encarga de gestionar y mantener la infraestructura, por lo que puedes concentrarte en instalar, configurar y gestionar software, así como en mantener la seguridad de tus datos. Los proveedores de infraestructura como servicio (IaaS) también ofrecen servicios adicionales, como gestión detallada de la facturación, almacenamiento de registros, monitorización, resiliencia del almacenamiento y seguridad. 

Puedes acceder a recursos IaaS de pago por uso, lo que te permite pagar únicamente por consumir los recursos que necesitas. Es decir, puedes aumentar o disminuir fácilmente los recursos, lo que te permite pagar menos cuando lo necesites o aprovisionar y escalar recursos al instante para satisfacer la nueva demanda.

 

2. ¿Por qué utilizar IaaS?

A diferencia de los entornos on‐premise tradicionales, la seguridad en la nube es una responsabilidad compartida entre los proveedores de servicios y sus clientes. 

Con los modelos de infraestructura como servicio (IaaS), la CSP protege los recursos y el resto del hardware que admiten la infraestructura subyacente, como computación, almacenamiento, parches y red física. Como cliente, serás responsable de proteger tus datos, tus aplicaciones, tus controles de red virtual, el sistema operativo y el acceso de los usuarios. 

Aunque a menudo se menciona la seguridad como una de las desventajas de la infraestructura como servicio (IaaS) y el cloud computing, en general, la nube no es ni más ni menos segura que los entornos on‐premise. De hecho, ofrece una protección más completa contra las amenazas. 

Además, algunos proveedores de servicios en la nube de confianza ofrecen una infraestructura segura desde el diseño y potentes servicios de seguridad en la nube en sus plataformas, que suelen superar los tuyos propios. Invierten constantemente en tecnologías avanzadas y expertos altamente cualificados, de modo que les ofrecen las soluciones de seguridad más recientes para proteger cada capa de computación. 

En otras palabras, la seguridad de IaaS es tan segura como lo hace tu proveedor de servicios en la nube. Por este motivo, es muy importante que evalúes detenidamente los proveedores y comprendas a fondo sus capacidades y responsabilidades de seguridad antes de tomar una decisión.

 

2.1 Ahorros de costos

Uno de los motivos clave por los que las empresas optan por soluciones de IaaS es reducir la inversión de capital y transformarla en gastos operativos. IaaS ofrece opciones de almacenamiento, computación y redes que no requieren que compren y mantengan grandes salas de servidores privadas que ocupan una gran cantidad de energía y espacio. 

La infraestructura como servicio (IaaS) elimina el coste de configurar y administrar un centro de datos físico, lo que la convierte en una opción rentable para migrar a la nube. Los recursos se utilizan bajo demanda, por lo que solo tienes que pagar por lo que utilizas.

Los modelos de suscripción de pago por uso que usan los proveedores de IaaS ayudan a reducir los costes del hardware y el mantenimiento, y permiten al equipo de TI centrarse en el negocio principal.

 

2.2 Disponibilidad las 24 horas

Las empresas deben pensar en lo que se necesita para respaldar su IaaS local y en la nube en función del talento disponible. Si alcanza un cierto nivel de tamaño se necesita cobertura las 24/7, ¿Cuántos ingenieros se necesitan para cubrir todos estos los sistemas durante los 365 días del año?

Hay organizaciones que han conseguido reclutar un equipo de personas para este tipo de escenarios, pero eventualmente se dan cuenta de que es difícil tener una vida fuera del trabajo. Entre las horas laborales, el estrés constante de que algo suceda y, sobre todo la excesiva responsabilidad que esto implica, afecta en última instancia a la innovación, ya que no  se puede esperar que las personas estén de guardia todas las semanas y al mismo tiempo.

Desde nuestro punto de vista, contar con monitorización de sistemas y acceso directo a 24/7/365 es indispensable, por eso se implementa este tipo de servicio de IaaS en la nube.

 

2.3 Tiempo de llegada al mercado

Cualquier organización que cambie de una infraestructura de TI local a una en nube pública como servicio (IaaS) pasará algún tiempo operando dentro de un modelo híbrido. No hay un interruptor mágico que pueda activar para migrar instantáneamente todo, desde sus centros de datos a la nube. Pero ¿cuánto tiempo pueden (o deben) coexistir?

En definitiva, no es recomendable usar una infraestructura híbrida durante un período de tiempo prolongado. Si bien es imposible evitar una configuración híbrida durante un período de transición, la mayoría de las organizaciones se benefician más al comprometerse con la IaaS en la nube por completo (o tanto como sea posible) y al seguir un plan que pueda llevarlos gradualmente en el transcurso de dos o tres años.

 

2.4 Escalabilidad bajo demanda

La escalabilidad es uno de los mayores beneficios de IaaS. Esta escalabilidad bajo demanda proporciona flexibilidad y mayor agilidad permitiendo ampliar o reducir rápidamente en respuesta a los requisitos de una empresa. Los proveedores de IaaS generalmente poseen tecnología muy potente y de última generación de almacenamiento, servidores y redes.

Una de las mayores ventajas de IaaS para el cloud computing es la capacidad de aumentar o reducir los recursos rápidamente en función de las necesidades de la empresa. Puedes adaptarse a los picos de demanda repentinos y casi al instante cuando los recursos ya no sean necesarios.

Otra ventaja es que IaaS permite adquirir escala mundial y afrontar picos de demanda de recursos. De este modo, puedes ofrecer recursos de TI a los empleados desde cualquier lugar del mundo con más rapidez, mejorando el rendimiento de tus procesos. 

 

3. Aspectos que debe tener en cuenta al elegir un proveedor de IaaS

Elegir un proveedor cloud no es una tarea sencilla, ya que hay muchas opciones disponibles y analizar cada una de ellas sería inviable. Sin embargo, escoger el proveedor adecuado para un negocio es crítico para el éxito a largo plazo. Así que, para cumplir eficazmente con las expectativas y garantizar una migración con éxito al cloud, hace falta tener una estrategia clara.

Cada servicio cloud tiene sus ventajas y fortalezas, así que es necesario que nos aseguremos de que el proveedor de servicios cloud elegido está alineado con los objetivos de la empresa. Por eso es importante definir una lista de necesidades y expectativas concretas con antelación. De este modo podemos pasar directamente a los aspectos que realmente nos interesan, en lugar de revisar una larga lista de requisitos.

  Quién es

Lo primero de todo es identificar qué y quién es el proveedor cloud. Hablamos de no dejarnos llevar por el común del mercado, por la masa, y hacer un análisis a fondo de la empresa en cuestión, de sus orígenes, trayectoria en la arena cloud, clientes similares, posibles conflictos de interés o su capacidad de inversión para seguir no solo manteniendo el servicio, sino también mejorándolo día a día.

  Localización

La localización es un punto esencial que deberemos tener en cuenta a la hora de contratar un servicio cloud, especialmente si pensamos mover cargas críticas, datos confidenciales o sensibles y si formamos parte de algún sector de actividad especialmente regulado, como puede ser la banca o la Administración Pública.

Pero la localización no es un tema clave sólo por un asunto legal, sino que también hemos de tener en cuenta aspectos técnicos. Con el auge de más y más servicios conectados, la cercanía del centro de datos de nuestro proveedor con el punto final donde se consuma el servicio es fundamental, especialmente en tareas que requieran de latencias mínimas.

  Seguridad

La seguridad ha sido, durante mucho tiempo, el talón de Aquiles de los modelos cloud. Aunque esos temores ya están superados, lo cierto es que tendremos que asegurarnos de que el proveedor en cuestión tenga sistemas para detección y prevención de intrusos, personal cualificado para atender temas de seguridad, cortafuegos, medidas de aislamiento de hardware, etc. Además, deben haberse implementado controles que garanticen la seguridad física, incluidos controles para el acceso a hardware cubicado.

Los centros de datos deben contar con medidas de seguridad físicas que protejan los equipos y los datos frente a eventos adversos. Por no contar que tiene que haber un sistema de alimentación y funcionalidad de red redundantes, así como un plan documentado de recuperación ante desastres y continuidad empresarial.

Todo ello debe reflejarse, asimismo, en un documento vinculante legalmente en el que se establezcan claramente los niveles de servicio que nos deben prestar (SLA, por sus siglas en inglés).

  Especialización

No podemos obviar que no todos los negocios son iguales y, por ende, sus necesidades de servicio cloud tampoco. En ese sentido, deberemos elegir un proveedor que comprenda nuestras necesidades específicas y alinear su conocimiento técnico con esas metas.

Además, la empresa debe ofrecernos mecanismos concretos que faciliten la implementación, administración y actualización de los productos contratados a través de interfases prácticas e intuitivas. 

  Coste

Dejemos para el final el aspecto que suele estar el primero en las agendas de las empresas: el coste. Obviamente, lo más barato en igualdad de calidad técnica siempre es lo mejor, pero no podemos dejar de leer la letra pequeña.

En ese sentido, muchos proveedores bajan sus precios básicos pero esconden costes ocultos en caso de que aprovisionemos determinados recursos adicionales o importantes subidas de precio en caso de que tengamos algún pico de actividad no previsto ni contratado inicial.

Al mismo tiempo, deberemos asegurarnos de que el proveedor en que confiemos disponga de un equipo de facturación accesible con el que poder discutir cualquier incidencia, evitando aquellos que solo atienden estas quejas mediante correo electrónico o formularios ciegos en el panel de control.

 

4. Ejemplos de IaaS

4.1 Migración mediante lift-and-shift

Este es el método más rápido y asequible para migrar una aplicación o una carga de trabajo a la nube. Sin necesidad de refactorizar la arquitectura subyacente, puedes aumentar la escala y el rendimiento, mejorar la seguridad y reducir los costes de ejecutar una aplicación o una carga de trabajo.

4.2 Desarrollo y pruebas

Tu equipo puede configurar y desmontar rápidamente entornos de desarrollo y pruebas, lo que reduce el tiempo de comercialización de las aplicaciones nuevas. Con IaaS, puedes escalar y reducir verticalmente entornos de desarrollo y pruebas, haciendo que sea más rápido y económico.

4.3 Almacenamiento, copias de seguridad y recuperación

Tu organización evita el desembolso de capital para obtener almacenamiento y la complejidad de administrarlo, para lo que suele ser necesario personal calificado que administre los datos y satisfacer una serie de requisitos de cumplimiento normativo. IaaS es muy útil para controlar la demanda impredecible y la necesidad cada vez mayor de almacenamiento. También puedes simplificar el planeamiento y la administración de los sistemas de copia de seguridad y recuperación.

4.4 Aplicaciones web

IaaS proporciona toda la infraestructura necesaria para sustentar aplicaciones web, como almacenamiento, servidores web y de aplicaciones, y recursos de red. Tu organización puede implementar aplicaciones web con rapidez en IaaS, así como escalar o reducir verticalmente la infraestructura, sin dificultad, cuando la demanda de las aplicaciones lo demanden.

4.5 Informática de alto rendimiento

La informática de alto rendimiento en super equipos o clústeres de equipos contribuye a solucionar problemas complejos que implican millones de variables o cálculos. Algunos ejemplos son las simulaciones de terremotos, las predicciones climáticas y meteorológicas, la creación de modelos financieros, estudios biomecánicos y las evaluaciones de diseños de productos.

 

5. Diferencias entre la infraestructura como servicio, la plataforma como servicio y la solución SaaS

Al igual que otros modelos «como servicio», como Plataforma como servicio (PaaS) y Software como servicio (SaaS), los modelos de infraestructura como servicio ofrecen un grado de gestión. Pero ¿Qué diferencias hay entre IaaS, PaaS y SaaS? La clave está en que cada uno de estos modelos ofrece un servicio de nube distinto: un entorno de infraestructura, herramientas de plataforma y aplicaciones completas, respectivamente.

 

5.1 Infraestructura como servicio (IaaS) 

En el caso de los modelos de infraestructura como servicio, el proveedor de servicios aloja, mantiene y actualiza la infraestructura de backend, como la computación, el almacenamiento, las redes y la virtualización. Tú gestionas todo lo demás, incluido el sistema operativo, el middleware, los datos y las aplicaciones. 

  • Ejemplos de infraestructura como servicio (IaaS): Compute Engine,EC2,Cloud Storage, S3.

 

5.2 Plataforma como servicio (PaaS)

Al igual que los modelos de infraestructura como servicio (IaaS), el proveedor de servicios entrega y gestiona la infraestructura de backend de los modelos de PaaS. Sin embargo, los modelos de PaaS proporcionan todas las funciones y herramientas de software necesarias para desarrollar aplicaciones. Aún tienes que escribir el código y gestionar tus aplicaciones y datos, pero no tienes que preocuparte por gestionar ni mantener la plataforma de desarrollo de software.

  • Ejemplos de PaaS: Cloud Run, App Engine, Lambda, kubernetes.

 

5.3 Software como servicio (SaaS)

Con los modelos de servicio de SaaS, el proveedor de servicios proporciona toda la pila de aplicaciones, es decir, la aplicación completa y toda la infraestructura necesaria para enviarla. Como cliente, lo único que tienes que hacer es conectarte a la aplicación a través de Internet. El proveedor es el responsable de todo lo demás. 

  • Ejemplos de software como servicio: Google Workspace, Microsoft 365.

Share

Deja un comentario

¿Quieres saber más sobre Google y tecnología?​

¡Suscríbete a nuestra newsletter mensual!