Tipos de almacenamiento en la nube

En la actualidad almacenar datos puede ser un problema, ya que el volumen crece día a día, el coste de tener una infraestructura es elevado a lo cual se le suma el mantenimiento y la inversión en caso de necesitar más capacidad. Por esto, los proveedores de almacenamiento en la nube ofrecen servicios que permiten tener toda la información en un solo lugar sin tener que preocuparse por el coste de un datacenter, mantenimiento, amortización del hardware, actualizaciones o incluso el aumentar el espacio de almacenamiento.

El servicio de almacenamiento en la nube se divide en tres tipos: objetos, archivos, y bloques. Entre estos existen 2 puntos diferenciales, uno es la estructura interna, como tratan a los datos, lo cual conlleva a tener distintos resultados en cuanto al rendimiento. El otro factor es la finalidad o necesidad que se tiene para almacenar los archivos / datos, dependiendo de esto se elegirá uno u otro tipo.

En el siguiente post detallaremos las principales características entre el almacenamiento de objetos, el de archivos y el de bloques.

1. Almacenamiento de objetos

Este es el tipo de almacenamiento más común que podemos encontrar ya que admite todo tipo de formatos.

1.1. ¿Qué es el almacenamiento de objetos en la nube?

Como mencionamos no hay límite en el formato de los de objetos, ya sea data no estructurada, como videos, fotos, archivos de audio. En otras palabras cualquier formato de archivo que deseemos podemos almacenarlo en esta categoría.

Dependiendo del proveedor puede variar la forma de calcular los costes y haber algunas limitantes. En la gran mayoría de casos la configuración inicial es sencilla y en pocos pasos ya se puede empezar a subir los datos a la nube.

1.2. ¿Cuáles son los beneficios del almacenamiento de objetos en la nube?

Entre los principales beneficios está el tema de tener disponibilizados los datos no importa donde estemos ya que están en la nube.

Otro punto fuerte es el hecho de que tanto el coste del datacenter como del mantenimiento quedan anulados, ya que todo el hardware está por cuenta del proveedor del servicio en la nube, esto elimina la necesidad de tener un equipo que realice controles en los componentes o como sucede en muchos casos, tener contratada una empresa especializada en estos temas.

También está el hecho de que los servidores que utilicemos en la nube tengan distintos puntos de alojamiento, dando lugar a tener la data repartida en distintos puntos del mundo para una menor latencia a la hora de querer utilizarlos.

Es importante recalcar que la velocidad de transferencia de datos en la mayoría de casos se ve limitada por el ancho de banda local y no por el servidor en sí.

1.3. ¿Cómo puede GCP ayudarle con sus necesidades de almacenamiento de objetos en la nube?

Google Cloud Platform ofrece una solución de primer nivel para esto llamada Cloud Storage, la cual consta de todas las bondades anteriormente mencionadas con algunas características especiales.

En primer lugar cuenta con un sistema de clases, donde dependiendo la cantidad de veces que ingresemos a nuestros archivos variará el coste de almacenamiento.

Estas clases son Standard (sin límite), Nearline (30 días), Coldline (90 días), Archive (365 días).

Esto da la posibilidad de tener backups de disaster recovery en Archive con un coste extremadamente bajo al mismo tiempo que tenemos archivos a los cuales accedemos diariamente para uso cotidiano y que cada uno tenga un coste distinto.

También podemos gestionar los permisos de acceso a los archivos de manera granular, ya sea de manera individual, por carpetas o por cada bucket (balde) que tengamos.

2. Almacenamiento de archivos

Comúnmente este tipo de almacenamiento en la nube se utiliza para almacenar archivos provenientes de aplicaciones.

La estructura que aplica es de jerarquía, carpetas y archivos. Es muy similar a cuando trabajamos ficheros de forma local con la diferencia de que no dependemos de un hardware físico para almacenarlos y no nos tenemos que preocupar por quedarnos sin espacio.

Además como hemos hablado a lo largo del blog, tendremos acceso a todos nuestros archivos desde cualquier lugar siempre y cuando contemos con conexión a internet.

2.1. ¿Cómo ayuda el almacenamiento de archivos en la nube a la colaboración?

Gracias a estar en la nube se disponibiliza a cualquiera que tenga acceso, únicamente requerirá una conexión a internet y dependiendo el proveedor un software o directamente desde el navegador.

También se pueden integrar con sistemas locales, lo cual da lugar a subir y gestionar los archivos con mayor facilidad.

2.2. ¿Cuáles son los requisitos para el almacenamiento de archivos en la nube?

El único requisito para poder utilizar estos servicios es contar con un proveedor en la nube y una cuenta de facturación habilitada. En cuanto al resto solo queda acceder y realizar las configuraciones básicas, pero es una gran ventaja que todo esto se puede hacer al momento y en pocos minutos comenzar a utilizar el servicio.

3. Almacenamiento en bloques

Este tipo de almacenamiento es el más específico y alejado del usuario final ya que comúnmente es utilizado por empresas dada el enfoque que tiene.

Suele utilizarse como base de datos para sistemas de ERP los cuales por su demanda de capacidad requieren un sistema de almacenamiento dedicado y con la menor latencia posible.

3.1. ¿Qué es el almacenamiento en bloque?

Este sistema de almacenamiento guarda los datos en bloques, siendo cada uno de estos identificado por un ID único que da como resultado un rendimiento de almacenamiento y recuperación mayor al resto de tipos de almacenamiento.

Entre los 3 tipos de almacenamiento este podría considerarse el más complejo por su forma de trabajar, ya que toma cada dato o archivo que se le pase y lo divide en bloques (de ahí su nombre), lo que conlleva a los desarrolladores a diseñar una tabla de búsqueda de datos que les permita administrar el almacenamiento de la información.

3.2. ¿Cuáles son los beneficios del almacenamiento en bloque?

Los beneficios están directamente relacionados con lo que es el tipo de almacenamiento en cuestión. La alta capacidad de lectura / escritura es el gran diferenciador, haciendo que tenga el mejor rendimiento.

A su vez es altamente escalable por la forma que tiene de manejar los archivos, logrando así desde un inicio poder proyectar el crecimiento de los datos almacenados sin necesidad de luego tener que migrar a otros tipos de almacenamiento.